MARTA & RUTUS | Marta Torné

Debo esta RESEÑA desde hace mucho tiempo, pues posiblemente haga ya un mes desde que acabé el libro.

Pero es que... la verdad es que no tenía mucho que decir ni sabía muy bien cómo explicarme.

Ahora, dado que me voy de vacaciones y quiero dejarme las cosas hechas para mi regreso, supongo que ha llegado el momento.

Pero aviso, voy a ser muy breve. Sí.
Porque había visto una reseña que me había animado a leerlo pensando que sería una lectura muy entretenida, y divertida.

 Si queréis saber qué me ha parecido, seguid leyendo.

Este libro es, si no me equivoco, la primera novela de la actriz Marta Torné. No voy a decir nada respecto a su carrera profesional ni respecto a lo que pudiese haber influenciado ello con la publicación del libro porque, sinceramente, ni me va ni me viene.

Me la habían vendido como una novela entretenida y divertida, como bien he dicho al principio. Y bueno, la verdad es que la historia tiene su encanto por los puntos de vista que se plantean en ella que son: el de Marta y el de Rufus (su perro) -y ambos están muy bien representados en la portada del libro-.

Empecé a leer con muchas ganas y con mucha curiosidad, pensando todo el tiempo en si los hechos narrados serían verdaderamente cosas que le habían pasado a la autora en ese periodo de tiempo de su vida. En ese sentido es muy curioso poder ver el ritmo y el nivel de vida de una actriz española. Cuando entró en juego el perrito todo se vuelve muy adorable y hasta te ríes con algunas de las narraciones por parte de él, típicos pensamientos que podría tener un perro cuando llega un extraño a casa. O más bien, lo que pensamos que deben de pensar los animales con respecto a todo.

Hasta aquí bien. Lo único es que me empecé a aburrir como a la mitad del libro porque todo me parecía demasiado igual. Cada día era parecido a otro y las acontecimientos tampoco distaban mucho unos de otros. El libro se resume en los hombres que Marta va conociendo, en cómo todo se enreda cuando se lo lleva a casa, y cómo Rufus los ve a través de su punto de vista. Después, ya más por el final cuando las cosas por fin van cogiendo un poco más de interés, yo ya estaba demasiado aburrida de los "problemas". Sí, son problemas entre comillas.

Así que nada, una lectura fácil de leer, bien escrita -eso sí-, e ideal para quien no quiera nada fuera de lo común. Para pasar un par de tardes.

¡Hasta la próxima!